Desde la forma de tu nariz hasta tus posibles enfermedades hereditarias, desde tu línea de carrera profesional hasta la medida de vista de tus ojos, desde cómo fueron tus padres y cómo eso influencia en tu forma de elegir a tu pareja. Todo eso viene de influencia del sistema familiar. Ya sea para ser como el clan o para alejarse de él, los ciclos familiares se repiten una y otra vez.
Lo genial sería que te des cuenta y que siendo consciente, desates amarras y hagas hermosos nudos; pues de no ser así, aún sin saberlo repetirás, gracias a la conexión con el todo, algún patrón de tu árbol familiar. Todos sabemos intuitivamente lo de todos. Si hay un secreto familiar, por más silencio que lo cubra, algo como un nieto oveja negra se dedicará, quizás sin saberlo, a saldar las cuentas de su abuelo y su comportamiento influirá en todo el sistema familiar.
Y… TODO POR AMOR
El desequilibrio busca su armonía. Y repetimos una y otra vez actividades que entendimos como amor, aunque en realidad no lo sean. El camino de desaprender lo que la familia enseñó con el ejemplo, es largo pues lo que nos marca de y en la familia es todo lo relacionado a la sexualidad y las uniones, a la muerte y las despedidas; todo aquello que crea el camino de la vida y lo que la destruye y transforma.
Los retos donde la vida se perdió, retan al sistema familiar a integrar y despedir a sus muertos y a establecer un vínculo sano entre vivos y muertos. En la historia familiar, son importantes todos los hechos que nos hacen vibrar con la vida y con la muerte. Y como seres humanos cada vez más despiertos, es nuestra tarea, y quizás nuestro karma, entender porque sucedió lo que haya sucedido y tomar un compromiso serio con nuestra vida.
Un paso importante en la vida de todo ser humano es aceptar a sus padres tal y como son. Sí, tal y como son. Entenderlos como seres humanos y, luego de aceptarlos, darnos a nosotros mismos todo aquello que creemos que ellos no nos dieron, pues; el regalo más grande que ellos nos han dado es la vida.
Analizar el árbol familiar da muchas respuestas, se los recomiendo. Lo otro que es muy importante es que es la madre la que da espacio y autorización a que amemos a nuestro padre. Un regalo enorme que ambos padres pueden dar a sus hijos es querer en él al otro progenitor (más allá de la historia entre los dos y de sus detalles).
Quizás este post quede pequeño para todo lo que pretendo explicar, pero dejaré aquí algunas frases para que, si notan que repiten dinámicas de algún familiar o les faltó despedirse o decir algo, rompan con lo adverso y se liberen:
«Lo cargué por amor, lo hice por amor y con el mismo amor te lo devuelvo»
«Aunque sea un poco fue también mi decisión. Tal vez estoy siendo leal»
«Pudiste ser mi primer hijo y así tendrás siempre un lugar en mi corazón. En nuestro corazón»
«Bendíceme cuando viva una vida diferente de la tuya y sea feliz y prospera»
«Tú eres tú y yo soy yo»
«Acepto tu destino»
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